jueves, 21 de abril de 2011

Los Externos

En el manual de cómo crear tu grupo mutante viene bien claro que es fundamental tener una archinémesis. Un malo que esté por encima de cualquier otro. Ese es el papel que cumplía Mag-neto con la Patrulla, Apocalipsis con el pri-mer Factor X o Emplaca con Generación X. Pero cuando Rob Liefeld convirtió a los Nuevos Mutantes en X-Force se encontró con que sus enemigos de toda la vida, los Infernales, acababan de ser liquidados para celebrar el fin de la era Claremont. E inventó a Gideón, un tío de pelo verde de lo más maquiavélico, que manipulaba a su antojo para conseguir sus fines (algo curioso teniendo en cuenta que X-Force era una colección de pistolones, testosterona y violencia fácil).

Pero la idea de Liefeld iba más allá y consistía en aprovechar que Selene (la Reina Negra del Club Fuego Infernal) y Apocalipsis llevaban vivos desde hace miles de años para crear una subespecie de los mutantes: Los Externos. Nueve mutantes inmortales, cada uno representando un concepto:

- Absalom: La Desesperación. Le salían espinas de hueso del cuerpo. (En la imagen, es el rubio del centro).

- Apocalipsis: La Destrucción. Es hipermultipoderoso.

- Burke: La Fortaleza. No sé qué poder tenía (en la imagen, es el segundo contando por la izquierda del corpiño discreto).

- Candra: El Engaño. Era telequinética (la rubia de la izquierda).

- Crule: La Ferocidad. Tenía sentidos aumentados, armas naturales y la piel morada. Es el Lobezno del grupo.

- Gideón: La Oportunidad. Copiaba los poderes de otros (tercero comenzando por la izquierda).

- Nicodemus: La Sabiduría. Predecía el futuro (el segundo, comenzando por la derecha).

- Saul: La Paciencia. Levitación, fuerza y agilidad. Como un monje Shaolin, pero en inmortal (el señor chino, tercero empezando por la derecha).

- Selene: La Corrupción. Era una vampira vital y controla la materia inanimada. Casi nada (la señorita de la derecha).


De estos, los seis que no eran malos de verdad (es decir, menos Selene, Candra y Apocalipsis) formaban los Altos Señores, que manejaban el mundo a su antojo y se dedicaban a buscar a los nuevos Externos. Primero, pensaron que era Mancha Solar. Después, se decantaron por Bala de Cañón, dado que cuando está "lanzado" (volando como una bala de cañón) tiene un campo de fuerza que le hace invulnerable. Él representaba la Esperanza. Y mientras, el Virus del Legado se saltaba a la torera su inmortalidad y acababa con Burke y Nicodemus e infectaba a Absalom. Hasta ahí, la historia iba bastante bien.

Pero entonces, en un enfrentamiento, Estrella Rota le dijo a Absalom: "Quieto o te corto la cabeza. Dudo que ni tú pudieras sobrevivir sin cabeza". Y entonces, todo cambió. La unión de "Inmortales", "Altos Señores" y "Cortar Cabezas" despertó en un editor de Marvel su poder mutante para detectar demandas judiciales por plagio (en la serie de “Los Inmortales”, basada en la película de los 80, había unos “Altos Señores”) y se decidió que tenían que cargarse a los Externos.

Primero cayó Candra cuando Cíclope, casualmente, disparó un rayo contra la joya que le daba poder y la mantenía viva. Los malos nunca aprenden a dejar esas cosas en una caja fuerte. Ella, los dos muertos por el virus y los tres que iban a conservar (Selene, Apocalipsis y Bala de Cañón) hacían seis. Solo quedaba cargarse a cuatro. Y Absalom estaba infectado por el Virus del Legado...

Sin embargo, al editor de Marvel no le debía apetecer recrear en cómic la novela "Diez Negritos". O, a lo mejor, es que era una solución muy lenta demasiado lenta para evitar los tribunales. Así que utilizaron a Selene para acelerar las cosas. Y allí que se plantó la Reina Negra para desmontar el argumento. Para demostrar que no eran inmortales, les absorbió la vida a Absalom, Saul, Gideón y Crule. Y por si quedaba alguna duda respecto al resto de la historia, negó que alguien pudiera ser inmortal: Apocalipsis era más máquina que hombre tras usar los aparatos de los Celestiales (unos señores muy grandes que son como dioses y que son los responsables, por ejemplo, de que existan mutantes), ella usaba las vidas de otros.

Y así terminó un argumento que no estaba tan mal pero que Liefeld se ocupó de condenar (a este señor es que no le sale una bien) y que terminó convirtiéndose en una de las mayores cagadas de Marvel. En estos momentos, tras la muerte de Selene en Necrosha, el único mutante vivo que puede pasar por inmortal es Apocalipsis. Aunque no hace mucho le metieron unos cuantos tiros a Bala de Cañón y se levantó... ¿habrá regresado el argumento ahora que ha pasado tiempo de las películas y casi nadie recuerda la serie? A saber, pero después del Día M (cuando el 90% de la población mutante perdió sus poderes gracias a la Bruja Escarlata) queda muy poca gente para formar parte de los Externos. A no ser que hagan una resurrección en masa, que siempre es posible.

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