
Si ese fue el principio del fin, “Operación Tolerancia Cero” supuso la constatación de que lo buenos tiempos mutantes se habían terminado para siempre y que lo ocurrido en Onslaught no era una excepción, sino la regla a seguir a partir de ese momento. La calidad y la originalidad eran prescindibles. Y para muestra, estos son las líneas generales de los argumentos de las dos sagas:
- Alianza Falange: Unos robots cazamutantes (los tecnoorgánicos Falange) que pueden neutralizar los poderes de los X-Men están atacando la mansión lo que obliga al infrautilizado Banshee a huir con la inexperta Júbilo, el salvaje Dientes de Sable y la fría Emma Frost (antigua Reina Blanca del Club Fuego Infernal que en esta saga se volverá buena).

Lo peor del asunto es que el guionista es exactamente el mismo, Scott Lodbell. Nunca es que hubiera sido demasiado original (les doy una pista Gen X / Gen 13) pero plagiarse a sí mismo parece excesivo. Seguro que los editores de Marvel le dijeron algo así como “Onslaught ha sido una mierda, queremos algo más del estilo de Alianza Falange”. Y dicho y hecho. El bueno de Scott no se rompió la cabeza. No me extraña que se fuera después de esto.
En fin, suenados saludos a todos.
jajajja, no había caído en que las dos sagas esas eran igualicas en su planteamiento. Personalmente me quedo también con la Alianza, aunque la parte de Sanción Final (creo que se llamaba así) me pareció más mala que lo demás.
ResponderEliminarPor cierto, acabo de dar con tu blog y tiene buena pinta. Enhorabuena, tienes un lector más.
Saludos.
Yo me di cuenta por casualidad, mientras pensaba en un artículo sobre Tolerancia Cero. A mí me gusta más Alianza, pero la verdad es quitando el argumento central, el resto eran bastante malas.
EliminarMe alegro de que me encontraras y espero que te guste.
Muchas gracias por el comentario.